MEDIACIÓN ES EL DERECHO A OPTAR ENTRE NUESTRO ACUERDO JUSTO Y SU JUSTA SENTENCIA O RESOLUCIÓN
La mediación no es la panacea que todo lo arregla, los mediadores no ofrecemos humo, tan solo una nueva oportunidad para el justiciable. La mediación, junto a otras alternativas, es un procedimiento optativo al que se puede acudir voluntariamente, cuando me encuentro ante un conflicto que no soy capaz de solucionar y necesito ayuda para ello, pero ayuda no tiene porqué significar dejar en manos de otra persona la solución. La solución puede estar en mis manos y no la veo, por el bloqueo existente e inherente a la situación, por lo que haría falta indagar entre las posiciones, los intereses y las necesidades, e ir extrayendo posibilidades hasta encontrar la más satisfactoria para las partes implicadas, esa es la misión del Mediador escuchar activamente para reconducir al diálogo y desbloquear.
Nuestra sociedad se ha ido acomodando a
que sea otra persona la que solucione, que sea un tercero investido de
autoridad, el que tras un riguroso proceso, con sus plazos, sus
formalismos, sus objetivos y finalidades determinados, etc.. de la solución, o
más bien la razón. El afán de victoria, de ser el ganador,
aunque sea reclamando tus derechos subjetivos de carácter personal. Si
verdaderamente confío que estoy en mi derecho ¿porqué litigarlo? ¿no es más
fácil hablarlo, dialogar, escuchar y extraer la solución razonable para ambos?. Tal vez de
miedo a escuchar a la otra parte, a que sus razonamientos puedan hacer
ver que me equivoco, o tal vez por orgullo personal, por el rencor que se va
almacenando por esa falta de olvido.
Si verdaderamente crees que llevas razón,
lo que interesa, el fin último es que la otra parte cumpla y haga lo que
se necesita, de que te sirve que sea un tercero el que imponga algo que
posiblemente tarde muchísimo e incluso nunca se va a poder cumplir o ejecutar,
ni de forma parcial siquiera. Sería mas lógico buscar el interés por un
cumplimiento efectivo para satisfacción de las necesidades
objetivas o subjetivas de ambos.
Ahora bien, el problema que nos
encontramos los mediadores es cómo hacer ver a las personas que la mediación
es una opción que se elige entre varias vías de solución, y para ello nos
vemos en el laberinto de difundir y demostrar con la práctica, la cual es casi
nula, sobre todo en Andalucía, ya que hay una tremenda desconfianza en este
proceso. Hay muchas limitaciones, en primer lugar la falta de
conocimiento, para continuar después con la existencia, hasta no hace
mucho, de una única opción, el litigio, la acomodación a que
sea otra persona la que decida sobre nuestras vidas, y si se equivoca la culpa
es de ella.
¿Y qué estamos haciendo los mediadores para ello? explicar, divulgar,
difundir las ventajas de la mediación, los beneficios
están muy claros, y se reiteran en Congresos, Doctrinas, Talleres
etc, se crean un sin fin de Instituciones, hay innumerables variedades de
cursos para formar a mediadores, pero el fin último no lo estamos consiguiendo,
el fin es que se utilice la mediación, las utilidades y beneficios
ya la sabemos los mediadores y las instituciones, ¿y los mediados?. Falta esa transmisión
a los mediados de las ventajas a pie de calle, y para ello todas
las Instituciones, Asociaciones, etc se deberían de unir, pues
coincidimos en un fin común, el ejercicio de la opción a la mediación,
o es que ¿quizás hay otros fines?
¡Mediación es un derecho a elegir entre Nuestro Acuerdo
Justo y su Justa Resolución!
No hay comentarios:
Publicar un comentario